2/12/2012

impotencia

sorprendentemente, las personas más ruines, como virus atacan al organismo vivo, al que produce, al que somete su cuerpo y su espiritu a la disciplina de la obra.
Cuando no encuentran dónde morder, ciegos en su estulticia, intentan convertir en mal el bien que haces.
Cuanta bajeza, qué desatino, esa loca fiera que se muerde y muerde sin sentido.....

Sigamos ignorando las heridas que nos hacen, hacia el frente, en nuestra línea, se abre nuestra constancia y nuestra entrega.

Brindo por que sigan intentando hundirnos, será una señal clara de que hacemos lo correcto.